Lo que sabe un entrenador

El partido (y la derrota) ante el Barcelona nos deja varios pensamientos. Yo me voy a centrar en uno. Nadie sabe mejor que un entrenador lo que tiene entre manos.

Todos nos sorprendíamos un poco con la alineación de Manolo Jiménez, pero el Sevilla le aguantó el partido al Barça en la primera parte. Sólo un gol de rebote nos puso por debajo y un remate de Kanouté que se quedó en el larguero nos pudo hacer igualar el partido.

Y eso que yo no me acuerdo de ese posible penalty a Kanouté porque yo vi desde mi sitio cómo nuestro malí se llevó el balón con la mano (qué pena que también lo viera el línea...).

Muchos en la grada le pedían (como siempre) a Jiménez que echara el equipo hacia adelante, que se buscara la portería contraria, que sacara a Romaric, a Renato, a Capel (qué pena que sólo te dejen jugar con 11...).

Y quizá Jiménez lo hizo. Y eso fue el fracaso del Sevilla. El Barcelona encontró espacios y nos mató al contrataque. ¡Cómo se notó la falta de Schilacci!. Y qué pocos repararon en los horrible saques de puerta de Palop, que nos acabaron costando los dos últimos goles.

Capel demostró que nada de nada después de la lesión y más cuando Jiménes lo colocó en la izquierda. Como ya sucediera ante el Valencia, Alves vio una autopista a partir de ese momento, ya que se pudo quitar de enmedio a Adriano, que le había hecho un magnífico marcaje individual....

Y para acabar lo de Luis Fabiano. Por favor, que sea verdad lo de los 30 millones y el Manchester City. Porque no se puede ser mas que tonto para quitarse del cartel de esa manera. Y no sólo en este partido, sino en uno de sus marcos favoritos, el Bernabéu.

Dos cosas son lo único positivo. En el Bernabéu será más fácil ganar con un delantero que con dos. Y, algo más importante, que en las próximas jornadas el Barcelona jugará a nuestro favor contra Valencia, R. Madrid y Villarreal.

De momento, apenas una hora y media después del partido no se me ocurre nada más.


*** Por cierto, rectifico una vez vista la televisión. El penalty a Kanouté es absolutamente real. Además, debió ser expulsión de Piqué. ¡Cómo hubiera cambiado el partido!!!!.

Presentación

Presentación
Soy sevillista. Y periodista. Parece que en los últimos tiempos estas dos palabras están condenadas por muchos. Por los de un lado y por los de otro. Incluso, cuando van juntas, por Nervión no se lo creen. Pero es verdad.Y soy socio. Y de los que tiene un número bajo. Y estoy orgulloso de eso. Cierto es que cuando uno está trabajando no tiene por qué expresarse como le gustaría como sevillista. Incluso por encima de ello está la ética personal y la profesional. Pero el que recibe una información profesional, en el fondo, sabe que si sólo escucha lo que quiere escuchar cerrará sus oídos y se quedará en la anécdota.A partir de ahora, en este pequeño hueco de sevillismo en internet intentaré dar mis puntos de vista. Con el apasionamiento imprescindible de mi corazón rojo y blanco, ése que me ha llevado a ver a mi equipo disfrutar con la misma pasión de dos ascensos a Primera (seguro que los más viejos del lugar recordarán aquella celebración con el albero que rodeaba al césped del Sánchez Pizjuán lleno de aficionados antes de un partido con el Valladolid) y de seis triunfos en finales. Y digo seis porque sólo estar (como estuvimos muchos) en la segunda final de Mónaco ya era una victoria.No esperéis aquí una información pura y dura del Sevilla Fútbol Club, que alguna habrá, ni tampoco una actualización continuada. Pero al menos sí deseo que de vez en cuando os pueda hacer llegar mi opinión y conocer la vuestra.El periodista sevillista